hace tiempo que me acuerdo de ti

Un día vimos el sol en nuestras miradas. Un día vimos el color azul del mar en nuestro rostro, sentimos una brisa suave de tarde calurosa de verano y nos abrazamos, mirando al amor de frente, a la cara, orgullosos de pertenecer a su estirpe, orgullosos de ser reyes por un día en el pais de las flores y del júbilo.
Escucho en tv la campaña electoral, verdades y mentiras de retan en la misma cancha, egocentrismos en estado puro, ¡Dios¡ de que estamos hechos las personas. Este no es un espacio político y mi voto lo tengo decidido desde hace ya mucho tiempo pero es difícil sustraerse, evadirse ante semejante asalto a la verdad, a la honestidad. Opina todo el mundo, en la calle, en el metro, en cualquier sitio donde se junten dos personas, y yo que ni soy ni dejo de ser políticamente correcto me pregunto donde estarán los sabios, los que con honradez buscan y defienden la verdad, los que trabajan para ella, ¿vale lo mismo su opinión que la de cualquier otra persona?, ¿vale lo mismo la opinión de unapersona socialmente activa que, por ejemplo, paga impuestos, a la de un preso criminal?.
Honradamente, si privádamente necesitamos un consejo recurrimos al amigo serio y coherente, sereno y capaz o nos dejamos asesorar por ese otro despreocupado y holgazán, egocéntrico y vago.
No defiendo una oligarquia del voto,valla por delante pero me gustaría saber su opinión al respecto; en realidad me gustaría saber posibles alternativas a este sistema, ¿quién es el valiente?.

Un vino: en este día de calor, al atardecer aquí en Galicia, con esa brisa suave y fresca de la costa, Martin Codax Gallaecia 2004, 100% albariño, D.O. Rias Baixas, creanme que es un vino que nos va a probocar sensaciones que nos harán sonrojar. Una elaboración en sintonía con los vinos alsacianos, dejando sobremadurar las uvas en la cepa, en septiembres calurosos y despues de un año benigno la uva pacientemente se va cargando de azucares y acidos que una vez en la bodega manos sabias sabrán dirigirlos hacia este grandioso vino complejo en sus aromas, capaces de inundar toda una habitación. En la copa es donde Gallaecia alcanza su madurez dejandonos soñar con cestas de frutas en manos hermosas, la cidez justa para darle la frescura que necesita y fondos de orejones sabrosos. Tiene fuerza este campeón. El precio también es importante.

Abusando de su generosidad, ahí va eso:

...Hoy perdí un amigo

-Día triste, ¿verdad Johann?

-¿Que te pasa Amador?, ¿que te pasa, hombre?

-Perdí un amigo, un buen amigo.

-Día triste Amador, día triste, sí.

-¡Qué ratos juntos, Johann, no lo creerías…¡

-Lo creo bien, amigo Amador, lo creo bien...

-¿Sabes lo que siento de veras Johann?

…

-Siempre es lo mismo, siempre, lo mismo…

Sabes que le vas a coger cariño de la misma manera que sabes que le perderás.

Es cosa de tiempo…Johann

Siempre el tiempo.

…

-Pero esta vez es diferente Johann, esta vez es muy diferente…

Esta vez tengo conciencia de su pérdida, ¡maldita conciencia!

Esta vez se que se me fue…huelo su ausencia, su vacío.

Me queda, eso sí, su esencia, luz de luces, sol del bien, flor del jardín más hermoso que la primavera creó.

Me quedan sus palabras, me quedan sus silencios…

¿Tú sabes que los libros también tienen momentos de silencio Johann?

…

-No lo sabe mucha gente, amigo, pero te aseguro que esos silencios son tan profundos como la soledad de un suicida cuyo horizonte se pierde en la lejanía de sus lágrimas no derramadas

Y como no los respetes, ellos se disgustan…

Y se callan cosas…

Y no te susurran sus secretos

Entonces, esa relación maravillosa se va marchitando

Como las camelias preciosas que me regalaste ayer,

hoy amanecieron sin luz Joan, llenas de pena y nostalgia

de su madre, de sus hermanas, del sol y la madrugada, del rocío… del rocío.

Los libros, Johann, también se ríen; que sí, Johann, que ríen y lloran, y callan y hablan, sobretodo hablan. Y cuando vuelvas la última página, escucha, pues te dirán

adiós amigo, acuérdate de mi, háblale a la gente de las cosas que te conté, diles que las palabras nacen para ser brisa suave y calida, beso de enamorado, pecho de madre y

abrazo de padre…

¿Cómo se llamaba tu amigo Amador?

Que importa ya, amigo Johann, que importa ya.

“de la tristeza de acabar un buen libro”

de libros

En estos primeros días, permitanme que les hable de las cosas que más deleite me producen y por ende que pienso pueden ser igualmente placenteras para ustedes. Les he hablado de mi pasión por el vino, este maravilloso y complejo mundo de las uvas y sus derivados; permítanme hablarles ahora de otra de mis pasiones, poco ejercitada en los últimos seis años por motivos que comentaré en otro momento, que son los libros. Y es curioso, no se si les pasará a ustedes que, en esta época de las nuevas tecnologías, nuevos soportes informáticos y esa eterna discusión acerca del libro (como lo entendemos nosotros, es decir, hojas de papel cosidas o pegadas y perdidas por unas tapas de cartón o piel, en el mejor de los casos), y su desaparición como tal, a mi me resulta inverosímil identificar una buena obra con un documento enterrado en un ordenador, dentro de alguna carpeta y más o menos organizado; una buena obra alcanza todo su esplendor dentro de un buen recipiente como ese buen vino, envejecido por los amables años dormidos en un silo y que, a la hora de presentarlo, no tenemos mejor ocurrencia que decantarlo en una jarra metálica típica de cantina militar... Creo sin embargo que las nuevas generaciones empujan fuerte y ¡ay Dios mío! nos vamos quedando poco a poco, lentamente, muy solos en la lucha de la piel y la hoja.
De la gran cantidad de sensaciones que nos puede transmitir un libro solo lo sabemos los que somos asiduos usuarios, sabedores de los maravillosos universos que encierran. Dibulgadores de conocimientos, suscitadores de sueños, amigos siempre cual perro fiel, nos acompañan con plácida ternura hasta el ocaso de nuestro ser.
Pòr último dejenme dejarles una referencia más que interesante: www.iberlibro.com (no llevo comisión).
Un vino: un ya clásico riojano, crianza para más señas este Artadi Viñas de Gain 2004, elaborado por Juan Carlos Lopez de Lacalle en su tierra, Laguardia, monovarietal tempranillo, doce meses de barrica de roble francés, uva fresca y sana en la copa sobre fondo de madera limpia y noble, con carácter y viveza, vino que despierta sensaciones melosas y dulces, y recuerdos a vainilla y cacao. Precio muy interesante para tomarlo cualquier día sin buscar escusas.
Que pasen un agradable día.

Y al hilo de la conversación anterior escribí hace tiempo un artículo que me gustaría que leyeran:

A donde vamos a ir a parar querido Amador, a donde vamos a parar; tantas guerras y asesinatos, injusticias y violencia, abuso de todo y de todos…estoy preocupado Amador, estoy muy preocupado. ¿Y tú? ¿Cómo lo llevas amigo mío?

Exageras como de costumbre Johann, ves las cosas con un prisma equivocado. El mundo está lleno de cosas importantes y tú te pierdes en los detalles, sacas leyes de las anécdotas, principios fundamentales de hechos aislados...

No digas eso amigo mío; la guerra no es un hecho aislado por desgracia para nosotros, la violencia tampoco, abres los periódicos, escuchas las noticias y siempre es lo mismo, siempre lo mismo….

Verás, déjame solo hacerte un pequeño análisis y explicarte como lo veo yo, querido Johann. Para mí existen dos tipos de acontecimientos; al primero de ellos los llamaré acontecimientos sustanciales y son aquellos que nos han sido regalados y solo cabe disfrutarlos y engrandecerse con ellos. No somos sus creadores ni podemos destruirlos, tan solo admirarlos en toda su grandeza y belleza. El primero y más importante como te habrás dado cuenta ya es el hombre, la mas compleja de las creaciones de la naturaleza, y las más bella también; ¿Qué no habías pensado en ello? Pues hay muchas más: las mareas, el amanecer y el anochecer, la lluvia fresca que nos da la vida y el sol valiente que nos llena de ilusión la mañana; ¿Y la risa de un niño? ¿Has escuchado alguna vez una melodía más bella que la risa franca de un niño, Johann?

Ya, ya, ya, y las guerras ¿qué?, por no hablar del hambre en el mundo. Amador, los niños del hambre no ríen. Lloran amargamente la injusticia de sus pequeñas vidas sin aliento ni ilusión…

…Como te decía, por un lado están las cosas sustanciales y por otro están los acontecimientos insustanciales que hacen referencia a todos aquellos que la vileza humana provoca como las guerras y el hambre. Y adelantándome a lo que estás pensando te diré que al llamarles insustanciales no quiero restarles importancia a los hechos y sí a su naturaleza. Verás, te explico: estos desastres, las guerras, el hambre y todas esas cosas a las que haces referencia ¡son tan fáciles de solucionar¡ ¿ No ves que las guerras son hechos artificiosos provocados por la vileza y la codicia de los hombres?; y con tanta comida que sobra el nuestro mundo y gente muriéndose de hambre …¿no te das cuenta que esas mismas personas con todo su poder y prepotencia son incapaces de cambiar la simple marea de una marisma?, ni un solo amanecer, y ocurren todos los días, son decididos por los hombres…

Como ves querido Johann soy un optimista empedernido y pienso que gracias a Dios, las cosas bellas y buenas son además sustanciales e inalterables, y las malas y feas las hemos inventado los hombres y por lo tanto no tienen futuro pues carecen de la grandeza de lo eterno.

Y rezo todos los días por que acabemos pronto con tanta estupidez.

Y rezo todos los días por que veamos amanecer…

Ayúdame a rezar Amador, ayúdame por favor.

16 de junio de 2006

Hoy es un dia feliz

Hoy lunes es un buen día para tomar una buena botella de vino, hoy lunes, y el martes, y el miércoles; cualquier día es bueno para disfrutar del momento, apreciar cuantas cosas buenas nos rodean, vivirlas con intensidad, saborearlas con paladar de gastrónomo e ignorar las feas. No me digan ustedes que una buena conversación no puede ser un dulce momento de sensaciones; y un paseo en autobús por cualquiera de nuestras ciudades, una buena película en casa, una canción que nos hace volar hacia un recuerdo hermoso...
Yo he decidido disfrutar de todos los minutos de esta vida, en la medida de mis posibilidades, sin esperar demasiado de ella más que el aprecio y el amor de los mios, su comprensión y cariño. Y creanme que a fuerza de intentarlo,de salir de casa pensando lo bonito que está el día o lo buena que es la lluvia, de la suerte que tienes por controlar tus momentos, vivirlos a diario, en todo momento, llega un momento en que efectivamente empiezas a descubrir la belleza de las cosas, de todas las cosas, y dices que bonita es tu ciudad, tu gente, que suerte tienes de vivirlo así.
Y dejenme que les recomiende hoy un vino: un vino dulce para un momento dulce este moscatel de grano menudo de Ochoa ( D.O. Navarra ) , un vino para saborearlo fresquito, que no frió, despacito apreciando la intensidad de fruta que este vino nos enseña a uvas pasificadas y recuerdos a orejones de melocotón. Servido en copa corta tipo Pedro Ximenez, este vino de 12 º nos habla de su tierra y de su gente, honesto , con carácter, amplio y por supuesto dulce, muy dulce.
Feliz día tengan ustedes.

Y como es este bello mundo de los vinos, tan maravilloso como vivo, donde uno se siente más suelto y a gusto, es lógico que empiece a hablar de algo que tenga relación con él
Como les describiría mi relación con el vino; deseo deseo deseo suena bién ¿verdad?. Bonita palabra . Encierra tantos anhelos. Implica casi una obsesión por la búsqueda de algo.

Para los amantes del vino en particular y de cualquier cosa en general, el deseo forma una parte no despreciable del objeto amado; pero para nosotros es un deseo incierto, un deseo con temor, pues cuantas veces nos hemos encontrado con vinos corrientes disfrazados de gala en fiestas demasiado caras... Cuantas veces la "chica" más guapa, objeto de todos nuestros anhelos luego no sabía "hablar"... sí, olia bien, bonito perfume que usa para luego, en lo mejor de la fiesta apagarse como una florecilla sin luz, y dejarnos al resto sin palabras en el mejor de los casos.

Por otro lado, cuan agradable sorpresa nos hemos llevado en otras ocasiones cuando no esperabamos más que unas bonitas palabras, agradables en su cortesía y parquedaz, y nos hemos visto sorprendidos por la dulcura, fragancia delicada, hermosura y equilibrio de nuestra anfitriona; es así este mundo de enamorados, donde los engaños viven en la casa de ricos y pobres, y los honrados también.

Ven ustedes lo complicado que es el amor...

Presentación

Como no puede ser de otra manera lo primero que debe hacer una persona bien educada es presentarse así que aquí me tienes, Cepas Viejas para servirles y servirme en lo que pueda sernos útil a todos.

Del por qué de este nombre bien lo saben los que conocen mi entusiasmo por el grandioso mundo del vino, afición de herencia paterna que intento disfrutar con intensidad sin límites, algo que, por filosofía personal, también lo llevo a todos los aspectos de mi vida -pero esa es otra historia que algún día contaré-. Como bien pueden ustedes observar, el color de estas humildes palabras es el color del VINO, como decía Manuel Ruiz Hernandez, en otro capítulo que también describiré.

Pero no solo de vino se hablará aquí: cine, música, política, cosas que pienso pueden interesar a alguien; pero por encima de todo y sin que sirva de precedente aquí de un modo educado y delicado escribiré sobre mí, mis sensaciones, pensamientos, conocimientos...no en vano ¿ no es el vino un cúmulo de sensaciones?

Humildemente espero que mis comentarios acertados los tomen debido a la casualidad y aquellos que consideren injustos, lo serán por la falta de conocimientos, nunca por mala Fe.

Y sin más, espero podamos vernos pronto por aquí.